miércoles, 27 de junio de 2007

Espejo


Foto: JC.Rojas
Es absolutamente necesario que cada ser logre darle importancia a su relato personal, luego desde allí poder hacer co-relatos, compañeros de camino, amigos, amantes de los demás.
De todas formas el entramado mundano en lo cotidiano, nos dice que nuestro relato personal es en esencia un espejo, que se mira en otros espejos y según sea la posición de ambos, se iluminaran o se multiplicaran, se abrirán en mil caras o solo se mostraran desde lejos.

"...Una imagen dentro de la otra..."

"...Un salon, dos espejos, y la posibilidad de la danza, la belleza de los sonidos, la esfera circular..."

Un espejo a otro espejo le hace señales, le abre su relato, le manda símbolos, signos, le devela la cercanía de la lejanía…

El encuentro, vuelve hacia sí la mirada, creer estar mirando a otro y sin embargo mirarse a si mismo confundido, por eso es necesario crear una imagen única, un hilo conductor, un entramado explicativo que nos lleve hasta algún lado, ese horizonte que abrieron nuestros primeros ancestros cuando adoptaron la postura erguida y adquirieron la habilidad en las manos hasta llegar a escribir con una punta la infinitud del universo y la finitud de sus propios conocimientos acerca de todo aquello.

Horizonte común, percepciones múltiples; puntos que se bifurcan y se entrecruzan, puntos que convergen, Rueda fundamental, circulo sagrado, una red inabarcable, siempre intentamos crear espacios que cubran nuestra desnudez mesiánica, nuestra desnudez original.

“Temo que sea cierto, que unos fabriquen realidades
Y otros las realicen
Y otros las critiquen
Y otros las burlen
Y otros las corrijan
Y otros las desnuden
Y otros vuelven a imitarlas
Y otros las superen
Y otros las trasciendan
Y otros queden para siempre sumergidos
Y acaben en la muerte sin levantar sospecha…”

No todos precisamos de un reloj, para darnos cuenta que la maquina esta allí afuera, que la maquina es imagen de nuestra propia maquina y que todos componemos esta nada de una u otra forma...